Un estudio reciente ha revelado que es posible determinar si una persona necesita un tratamiento de ortodoncia desde la aparición de sus primeros dientes de leche o incluso desde antes de su nacimiento.

Un equipo de investigadores procedentes de Reino Unido y Finlandia ha estudiado la manera en que se desarrollan los dientes de leche, con la colaboración de unas 6,000 personas, con el objetivo de saber cuáles son las variantes genéticas que se asocian con los problemas dentales que aparecen posteriormente en la vida.

En dicho estudio, cuyos resultados fueron publicados en la revista PLoS Genetics, los investigadores rastrearon en los participantes los códigos genéticos desde los inicios del embarazo hasta la etapa adulta utilizando estudios a largo plazo como el de la Cohorte de Nacimiento y el estudio longitudinal de Padres e hijos de Avon.

Entre sus hallazgos estuvo la identificación de cinco genes que se asocian a la aparición del primero de los dientes de leche y con la cantidad de estos que el niño posee cuando tiene un año de edad. Asimismo, descubrieron que los que presentaban una asociación del gen con el brote de dientes tardío corrían un riesgo 35% mayor que el resto de necesitar en un futuro un tratamiento de ortodoncia.

Una observación puntual que hacen los autores de este estudio es que en realidad son muy comunes las anormalidades en el desarrollo dental y que tan solo los últimos dientes de leche que salen afectan hasta un 10% de los individuos.

Las consecuencias de estas anormalidades pueden llevar a tratamientos de ortodoncia, protésicos e incluso a intervenciones quirúrgicas que además de difíciles son costosas y la razón de aproximadamente el 6% de las visitas al dentista según los expertos, quienes también afirman que otros estudios relacionados a estos podrían ayudar con el análisis de enfermedades graves como el cáncer.