Todas las personas en cierta etapa de su vida han sufrido de las molestosas caries dentales debido a diversos factores, como por ejemplo: la carencia de una cantidad adecuada de flúor.

El fluoruro hace maravillas por la dentadura: protege el esmalte dental, remineraliza los dientes y evita la caries dental. Además, éste reduce la aparición de placa y sarro e elimina la sensibilidad dental a la hora de un tratamiento periodontal.

El fluoruro se puede utilizar sin problemas en niños para proteger y fortalecer sus dientes de leche, incluso es recomendable para jornadas preventivas escolares por su bajo costo.

 No se recomienda  la ingesta de este en infantes muy pequeños pero ya en adultos se puede utilizar disuelto en agua mineral para garantizar el efecto del mismo.

Otra forma de empleo de este es en pastas dentales, geles y enjuagues bucales. Ya con el último caso, debemos colocar cierta cantidad de fluoruro diluido en agua directamente en nuestra boca y permanecer sesenta segundos con el producto en la cavidad bucal para luego expedirlo.

Con los geles debemos ser más cautelosos, puesto que de esta forma ya hay una mayor cantidad concentrada de flúor; este método se recomienda más en personas que estén llevando a cabo un tratamiento.

También debemos tener en cuenta que el uso excesivo de flúor causa un desbalance produciendo un esmalte defectuoso, por este motivo es más recomendable utilizar pastas dentales que contengan fluoruro.

El uso prologando de fluoruro tiene un efecto positivo para nuestra salud bucal; ya que reduce notablemente la aparición de caries y enfermedades de las encías. Los porcentajes de reducción de caries al aplicar pastas dentífricas con fluoruro rondan entre 3% y 48.