Son muchas las propiedades de la saliva que podemos enumerar, las cuales son de vital importancia para el buen funcionamiento del organismo.

La saliva es la encargada de humedecer los alimentos en la boca, con el fin de que se puedan masticar, tragar y finalmente digerir de una manera más fácil. También tiene la función de arrasar con los restos de comida y eliminar las bacterias para evitar el mal aliento, la corrosión de los dientes y los malestares en las encías.

¿Sabías que sin saliva perderías tu dentadura en tan solo seis meses? Así de importante es la saliva, la cual desempeña un papel relevante en la defensa contra la caries, ya que disuelve y aleja los azucares de la boca y le ayuda a mantener el PH.

La composición de la saliva contiene un 99% de agua y un 1% de amoniaco, proteínas y sales minerales que causan mucha sed. Tomando en cuenta que una persona adulta puede llegar a producir un litro de saliva al día, es importante mantenernos hidratados para que la cantidad de saliva producida diariamente sea óptima. Los expertos recomiendan que consumamos entre 2.5 y 3 litros de agua por día para asegurar la hidratación.

La boca seca por Xerostomía es un síntoma que indica deshidratación por consumo excesivo de sal, alcohol o por mucho calor. También puede indicar estrés.

Otra de las bondades de la saliva es que mediante esta podemos detectar, al igual que en la sangre, ciertas enfermedades, sustancias o indicadores como alcohol, drogas ilegales, SIDA, estrés nervioso, incluso cambios hormonales.

Como ves, la saliva alberga una gran cantidad de información sobre nosotros, lo que ingerimos y acerca de cómo van nuestros organismos internamente.

Con una hidratación adecuada podemos impulsar y hacer más eficaz el desempeño de la saliva al hacerla más abundante.