Funcionalidad de las dolorosas muelas del juicio
«Muelas del juicio» para muchos es sinónimo de molestia y dolor, a pesar de que hay personas que no reconocen cuando éstas le están naciendo ya que no sienten los posibles síntomas.
Las muelas del juicio no son más que las últimas muelas o molares también llamadas cordales, las cuales pueden ser muy dolorosas debido a su ubicación; ya que cuando nacen generalmente no tienen espacio en el hueso.
Generalmente, las muelas del juicio son extraídas porque causan apiñamiento de los dientes, esto crea problemas en la mordida y deformaciones en los dientes. Una persona puede tener una sonrisa perfecta pero puede ser afectada negativamente por los cordales. Al estas no tener espacio para acomodarse, invaden el espacio del diente con el cual comparten los huesos, entonces las demás piezas dentales son empujadas.
Las muelas del juicio aparecen en la mayoría de casos, durante la adolescencia, se recomienda visitar al odontólogo periódicamente para que pueda verificar el nacimiento de éstas y evitar enfermedades y deformaciones en la mordida.
Luego de la extracción de estas muelas, el paciente necesitará un periodo de recuperación no muy extenso y no volverá a sufrir a causa de la inflamación y dolor que padecía.
Función de las muelas del juicio
Se solía creer que éstas ayudaban a masticar el tejido vegetal. Esto viene de la época de los homínidos, los cuales tenían mandíbulas más extensas que el homo sapiens y todo era parte de su adaptación a su hábitat; ya que necesitaban más espacio para acomodar los molares.
Sin embargo, no todas las personas desarrollan las muelas del juicio, motivo por el cual esta teoría difiere con las investigaciones de los científicos.
Otros investigadores sugieren que esto ocurre por el factor cultural y etnia de las personas.
Algo es un hecho concreto: los molares son molestos y dolorosos, el alivio de toda persona es la extracción de los mismos y esta es una de tantas las razones por las cuales amamos a nuestros odontólogos.